HOMENAJE

Los enemigos

Ellos aqui trajeron los fusiles repletos de polvora,

ellos mandaron el acerbo exterminio,

ellos aqui encontraron un pueblo que cantaba,

un pueblo por deber y por amor reunido,

y la delgada nina cayo con su bandera,

y el joven sonriente rodo a su lado herido,

y el estupor del pueblo vio caer a los muertos

con furia y con dolor.

Entonces, en el sitio

donde cayeron los asesinados,

bajaron las banderas a empaparse de sangre

para alzarse de nuevo frente a los asesinos.

Por estos muertos, nuestros muertos,

pido castigo.

Para los que de sangre salpicaron la patria,

pido castigo.

Para el verdugo que mando esta muerte,

pido castigo.

Para el traidor que ascendio sobre el crimen,

pido castigo.

Para el que dio la orden de agonia,

pido castigo.

Para los que defendieron este crimen,

pido castigo.

No quiero que me den la mano

empapada con nuestra sangre.

Pido castigo.

No los quiero de embajadores,

tampoco en su casa tranquilos,

los quiero ver aqui juzgados,

en esta plaza, en este sitio.

Pablo Neruda, Chileno.